Desconocidos en Internet

Vïdeo sobre seguridad en Internet para adolescentes entre 13 y 17 años. En este caso los datos personales, la configuración de la privacidad en Tuenti. Subido originalmente por OSIMenores.














Los engaños por Internet pueden provenir de publicidades, de portales, o bien por medio de correos electrónicos con y sin archivos adjuntos. Tenés cuidado con aquellos correos provenientes de remitentes desconocidos o dudosos, procurando no abrir el correo si es que tenés alguna duda al respecto. Y ante cualquier duda, si el mail proviniera de una compañía conocida, siempre podés comunicarte en forma telefónica con el servicio de atención al cliente y hacer las consultas pertinentes.

Otros sitios que representan potenciales peligros, en especial para los más jóvenes, son los sitios de chat y las redes sociales. No queremos decir que son sitios peligrosos por naturaleza, sino que muchas personas inescrupulosas pueden tener

acceso a ellos. Por eso, lo mejor es educar a los niños y adolescentes, y enseñarles algunas precauciones necesarias para tales casos.

Por ejemplo, debemos explicarles de los peligros de chatear o hablar con desconocidos. Debemos enseñarles a tener cuidado con las personas, y en no confiarse de ellas totalmente, incluso si estas personas tuvieran fotografías o información detallada: podrían ser mentiras. Puede que se conozca a esa persona desde hace mucho, pero sin una certificación (es decir: sin estar absolutamente seguros mediante alguna investigación que llevemos a cabo) sobre la veracidad de su identidad, debemos enseñar a los niños a no encontrarse en persona con estos desconocidos o conocidos virtuales, aún si fuera en sitios públicos. Si tu hijo definitivamente quiere hacerlo, entonces la mejor idea será acompañarlo, ya sea alguno de sus padres, o un hermano mayor o pariente que pueda reaccionar en caso de necesidad.

Otra buena idea es indicarles no publicar información personal, tal como dirección, número de teléfono, o incluso sus actividades y horarios. De igual modo, los adultos no deben publicar información como la descripta, ni los datos de su estado bancario, cuentas, tarjetas u otras a desconocidos.